jueves, 29 de septiembre de 2011

La oración de Jesús Malverde



Al mediodía un creyente de la Santa Muerte se acerca al altar de la colonia Doctores. Prende un cigarrillo para ofrecérselo a "la flaquita". Lo coloca a sus pies, toca la vitrina y vuelve a persignarse. Se detiene a contemplar al acompañante de su Niña Blanca, en el altar aledaño, que lo tiene intrigado". ¿Y quién es ese?", pregunta.
"Jesús Malverde, el santo de los narcos", le responden. Observa al maniquí vestido con sombrero y camisa vaqueros, chamarra de borrega, y una gran hebilla de oro en forma de pistola en la figura de cuerpo completo.
Mira el anillo de oro con una piedra roja que ahorca el paliacate cruzado por su cuello. Mira también la cadena que pende del cuello del santo.
Se vuelve a ver a la Santa Muerte y le dice: "permiso". Luego, dubitativo, se ubica al frente de Malverde, lo toca con la punta de dos dedos y se persigna. "Pues si ya está aquí, hay que rezarle, ¿no?", explica.
El mito de Jesús Malverde nace en Sinaloa alimentado por el imaginario colectivo. Un ladrón que robaba a los ricos para darles a los pobres. El Robin Hood sinaloense que supuestamente murió colgado después de ser capturado por “rurales” el 3 de mayo de 1909. De ahí que en la actualidad todos los días 3 de mes se recen rosarios en su honor.
Las historias de su origen son muy variadas y se contradicen.
Una de las versiones sostiene que Jesús Malverde nació en el estado de Jalisco y cuando aún era niño sus padres lo llevaron a Sinaloa; otra explicación sustenta que nació en Mocorito, muy cerca de Culiacán.
Su nombre también tiene un origen turbio, ya que según algunas versiones, el santo de los narcos nació bajo el nombre de Jesús Juárez Maso el 24 de diciembre de 1870 y adquirió el mote de Malverde porque después de cometer sus asaltos se escondía en el monte, "en lo verde". Como para unos actuaba perversamente, lo nombraron "Mal-Verde".
Pero también existe la teoría del complot. Según esta versión, es una figura creada por quien gobernaba en ese tiempo las tierras que hoy son sinaloenses, esto como mero pretexto para perseguir a cualquier oponente de los personajes prominentes de la región.

Jonathan Pardiñas y Dorothée Delacroix

lunes, 19 de septiembre de 2011

jueves, 15 de septiembre de 2011

San Pancho Villa, protector de zapatistas



Doroteo Arango es recordado en los libros de historia de México como uno de los protagonistas de la Revolución; pero para los habitantes del noreste del país y de una zona específica de Texas representa una imagen idolatrada.

Zapata, Texas. Aunque este pueblo de Estados Unidos lleva como nombre el apellido del Caudillo del Sur, el revolucionario mexicano más conocido aquí es Pancho Villa, a cuyo espíritu la gente cuando se encuentra en apuros, le reza tres Padres Nuestros y tres Aves Marías, después de una oración especial dedicada a él:
“Querido hermano,
tú que supiste vencer
a tus más fieros enemigos,
haz que triunfe en mis más difíciles
empresas.
Me socorras en mi negocio y penalidades;
a ti invoco de todo corazón,
así pues, te sirvas darme valor,
tú que fuiste guía de los desamparados y sufridos,
dadme tu pensamiento y tu osadía.
Así sea”.

En Zapata, Texas, los creyentes en el poder milagroso de Pancho Villa cuentan con ésta oración impresa en papiros y pergaminos, con escapularios, con velas y con agua de colonia para rendirle culto, tal y como lo hacen con otros santos de la iglesia católica. La fe hacia el héroe nacional mexicano recorre más pueblos y ciudades texanas, pero es en México donde el espiritismo es visto cada vez con menor rareza.
“Cuando empecé a hacer las figuras de la santa Muerte, la gente me pidió que hiciera también de Pancho Villa porque según que era más milagroso y que también los ayudaba mucho en lo que les pedían”, comenta Margarita Elizondo, artesana de Díaz Ordaz, un municipio de Tamaulipas que se encuentra entre Reynosa y Nuevo Laredo.
Margarita hace con sus manos delgadas y largas unas figuras de Pancho Villa que miden 2 metros de altura y pesan 800 kilogramos. Para erigirlas usa cemento, varilla y yeso. Una vez acabadas las ofrece a la orilla de la carretera en 2 mil 500 pesos. En los últimos meses, según cuenta, los Pancho Villa se venden más que la Santa Muerte.
“Parece que es porque han llegado muchos soldados y mucho Ejército y aquí eso no gusta tanto, usted sabe, y como se dice que Villa protege a la gente de los soldados, pues parece que por eso se está vendiendo tanto”.
Desde el inicio del mandato de Felipe Calderón la franja que va de Reynosa a Nuevo Laredo se ha convertido en uno de los principales frentes de la guerra declarada por el gobierno contra el crimen organizado.
Estampitas con la imagen de la Santa Muerte y altares en honor de ella son encontrados comúnmente por los federales al allanar casas particulares y de seguridad que usan los narcotraficantes.
Las imágenes de Pancho Villa, aunque en menor medida, también suelen aparecer
Así como algunos profesionistas, obreros y empresarios lo hacen, la mafia de esta región del noreste del país, se encomienda a ambos. De hecho, algunas de las recientes mantas con mensajes del narco, han sido colocadas en estatuas públicas de Pancho Villa o plazas que llevan su nombre.
Ella no es devota del bandolero que se convirtió en general de la Revolución de 1910. Margarita empezó a crear figuras de él para ganarse la vida, luego de divorciarse hace 5 años. Pero aunque no es devota de Villa dice que le consta que éste es milagroso porque varios conocidos le han contado los que les ha realizado y porque “los libros también dicen”.
Francisco Villa —quien en realidad se llamaba Doroteo Arango— fue asesinado el 20 de julio de 1923 en una emboscada en la que recibió 47 balazos.
El origen del espiritismo en torno a él es atribuido en algunos estudios al hecho de que el cuerpo de Villa desapareció de su tumba en Parral, Chihuahua. “Lo que se dice es que anda por aquí ayudando a la gente que se lo pide. Que se salió de su tumba para ayudar”, explica Margarita.
De acuerdo con investigaciones históricas, la desaparición del cuerpo se debió a una profanación hecha por militares mexicanos que habrían vendido la cabeza del revolucionario al gobierno de los Estados Unidos.




Incluso, el año pasado un grupo de estudiantes mexicoamericanos pidió que el gobierno de nuestro país reclamara a los Estados Unidos la devolución de la cabeza de Villa, la cual, según sus propias indagaciones, formaría parte de la colección de cráneos de la sociedad Skull and Bones de Yale.
Uno de los clientes que le compran figuras de Pancho Villa a Margarita es un joven treintañero de Monterrey que se fue hace cuatro años a Nuevo Laredo a poner un negocio. Pide que se le identifique solamente como Andrés y se asume como un espiritista que se encarga de asesorar a la gente en el culto a la Santa Muerte y a Pancho Villa.

“Lo que yo hago es muy sencillo. Hay personas que tienen algún problema, como un familiar en la cárcel o tuvieron algún accidente, o algún problema con la ley, y quieren salir adelante, entonces lo que yo hago es comentarles los rezos y las ofrendas que se pueden hacer por ellos y por sus familiares, y después de que aceptan yo me ofrezco a hacérselos”, explica.
La entrevista con Andrés fue en un pequeño camposanto dedicado a la Santa Muerte, justo en la entrada a Nuevo Laredo.
Existen por lo menos una docena de ritos que practica Andrés con la figura de Pancho Villa y por los cuales cobra entre mil y 2 mil pesos. No revela en qué consisten estos porque asegura que después pueden dejar de ser milagrosos en cuanto empiezan a ser divulgados. El único del que habla es el de la copa de tequila que se coloca frente a una vela y a una imagen del Centauro del Norte, como se conoció a Villa. Después de colocar el pequeño altar, el creyente debe hacer la petición. Si Villa se bebe el tequila de la copa, la petición se concederá.
Lo que parece no conocer es la razón por la cual hay que dejarle una copa de tequila como ofrenda, sobretodo cuando investigaciones biográficas como la hecha por Paco Ignacio Taibo II, revelan que a “San Pancho Villa” no le gustaba el alcohol. 


Diego Enrique Osorno

martes, 13 de septiembre de 2011

Horror



Imagenes por Denis Voronin

lunes, 12 de septiembre de 2011

fury



imagen por Andrew Burdin

miércoles, 7 de septiembre de 2011

El hada de Guadalajara y las reliquias de Juan Pablo II

 La supuesta hada, encontrada el pasado seis de agosto en Guadalajara, congregó a miles de personas hasta que se descubrió que era un pequeño juguete. Foto: Luis Fernando Moreno/ Notimex
DEL CATOLICISMO AL POLITEÍSMO
En el segundo punto de los Sentimientos de la Nación José María Morelos reafirmaba “la religion católica como única aceptada sin tolerancia de otra”. Dos siglos después, en la información de su Facebook, el ex cantante del recientemente disuelto grupo musical Maldita Vecindad y los Hijos del Quinto Patio dice que su religión es “el amor”, la “toltequidad” y el “sufismo”, aunque de éstas solamente la última podría considerarse propiamente una religión. Por supuesto, Roco es libre de creer y de practicar los cultos o ritos de su preferencia, incluso si son de su invención o carecen de personalidad jurídica —como el de la Iglesia Católica Apostólica Tradicional Mexicana Estadounidense, mejor conocida como de la Santa Muerte—, con la excepción, a menos que afrontara las consecuencias, de aquellos que sean considerados asociaciones criminales (como los narcosatánicos asesinos).
La Ley de Libertad de Cultos fue promulgada por el gobierno del presidente liberal Benito Juárez el cuatro de diciembre de 1860, como parte de las Leyes de Reforma, en un paso más hacia la modernización del país y contra el poder enorme del conservadurismo y la Iglesia católica, que con el auxilio de la Santa Inquisición desde la época colonial y hasta entonces había detentado de manera férrea el monopolio de las almas y gran parte del poder económico y político. No obstante que desde 1859 el gobierno juarista había decretado la prohibición a los funcionarios públicos de asistir a actividades de la Iglesia o de rendir pleitesía a sus jerarcas, en los últimos años hemos visto actos oficiales de presidentes y altos funcionarios, sobre todo panistas, como Vicente Fox, Felipe Calderón y el gobernador de Jalisco, Emilio González Márquez, que no ocultan su devoción a los jerarcas del catolicismo mundial y nacional. En Guadalajara aún resuena la mentada de madre que profirió en abril de 2008 el gobernador, con varios tequilas entre pecho y espalda y ante el cardenal Juan Sandoval Íñiguez, a los ciudadanos que mostraban su desacuerdo con la intención de donar 30 millones de pesos para la construcción del Santuario de los Mártires (de la Cristiada). Ante las protestas de un sector de la población el propio cardenal decidió rechazar la limosna. No obstante, el gobernador, ferviente católico que convocaba a sus colaboradores más cercanos para estudiar la Biblia en la Casa Jalisco (de Gobierno), organizó en julio pasado un homenaje al cardenal por ser un “jalisciense ejemplar”, haciéndolo pasar como un reconocimiento del pueblo jalisciense, tradicionalmente católico. Solamente asistieron unos pocos cientos de personas de las miles que esperaban.
MÁRTIRES, BEATOS Y APÓSTOLES
Jalisco fue uno de los estados donde estalló el movimiento armado de los cristeros —de 1926 a 1929— contra el gobierno del presidente Plutarco Elías Calles y sus leyes que, entre otras fuertes restricciones, privaban a la Iglesia católica de personalidad jurídica. El Santuario de los Mártires de Cristo, al que González Márquez quería regalar los 30 millones, está en construcción en la cima de un cerro en las orillas de Guadalajara y estará dedicado a la memoria de unos 40 religiosos que murieron durante el conflicto armado, en su mayoría oriundos del estado y beatificados o canonizados por el Vaticano. A pesar de ser una entidad en la que 92 por ciento de la población es católica —contra 83.9 en el país— según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), Jalisco es sede de una de las iglesias con mayor crecimiento e influencia política: la Iglesia del Dios Vivo Columna y Apoyo de la Verdad “La Luz del Mundo”, A. R., fundada en 1926 por Eusebio Joaquín González, nativo de Colotlán, Jalisco, y que dice contar con más de cinco millones de fieles en el planeta (www.lldm.org). A la Santa Convocación y Santa Cena anual en La Hermosa Provincia de La Luz del Mundo, dirigida por Samuel Joaquín Flores —hijo del fundador y quien se considera Apóstol de Jesucristo—, asistieron del ocho al 15 de agosto más de 300 mil delegados provenientes de 40 países. Como distintos jerarcas de la Iglesia católica, Samuel Joaquín también ha sido acusado de violaciones sexuales y de malversar los fondos de la Iglesia para construirse un lujoso rancho en San Antonio, Texas, donde, al igual que Jorge Hank Rhon, tiene ejemplares de animales exóticos. También, como pasa en la Iglesia católica, en “La Luz del Mundo” hay acusaciones de pederastia, crímenes y anomalías de diversa índole.

CATÓLICOS, A LA BAJA
En Jalisco la devoción por la Virgen de Zapopan, también conocida como La Generala, reúne a dos millones de fieles en la romería del 12 de octubre, en la que éstos acompañan a la Virgen en su regreso a casa, la Basílica de Zapopan, luego de peregrinar durante el año por diferentes recintos. Patrona de Guadalajara contra tempestades, rayos y epidemias, La Señora de Zapopan es más popular que la Virgen de Guadalupe y, al contrario que ésta, no le da por aparecerse en muros humedecidos ni en estaciones del Metro ni en mohosas rebanadas de pan (aunque ahora, nuevo padre de la patria, el “presidente legítimo” Andrés Manuel López Obrador se apropió del nombre con que también se conoce a la Guadalupana y bautizó con el acrónimo de “Morena” a su Movimiento de Regeneración Nacional). A pesar de los esfuerzos de los jerarcas, la religión católica ha sufrido un descenso en el número de fieles en todo el país desde 1950. El crecimiento de la población católica entre 1990 y 2000 fue de 1.7 por ciento, en tanto que el de no católicos fue de 3.7, y las tendencias actuales siguen un patrón parecido. En estados como Chiapas, Tabasco y Campeche se ha incrementado el número de protestantes evangélicos, mormones, adventistas y testigos de Jehová.
Desde el 25 de agosto y hasta diciembre las reliquias de Juan Pablo II, custodiadas por la Secretaría de Seguridad Pública, recorren las diócesis del país en un intento por atraer la atención de la feligresía y quizá captar nuevos fieles, tal lo expresó Víctor René Rodríguez Gómez, obispo auxiliar de Texcoco y secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) al invitar a los católicos y a los que no comparten esta fe “a unirse en los grandes valores: paz, dignidad humana, familia, diálogo, unidad, que proclamó en su vida y su discurso el beato Juan Pablo II”. Así, unas gotas de sangre, una figura de cera, un solideo y otras prendas personales son hoy objeto de veneración.
En su sitio, la CEM informa: “La Iglesia reconoce tres tipos de reliquias: de primer grado, son las que pertenecen directamente al santo (sangre, osamenta, etc.); de segundo grado aquellos objetos que pertenecieron o tocó el santo en vida, y de tercer grado aquellos elementos que tocan reliquias de primer grado. De esta manera, esperamos reliquias de primer grado ya que es una gota de su sangre resguardada en un ámpula, expuesta para venerar. También acompañarán algunas reliquias de segundo grado” (www.cem.org.mx). Pero sólo un milagro del nuevo santo logrará hacer que se incrementen las mermadas cifras de los católicos mexicanos, pues, como afirma Elio Masferrer, investigador de la Escuela Nacional de Antropología e Historia, las reliquias son un mensaje “de magia” que no le llega a los jóvenes —con otras preocupaciones—, sino a personas mayores de 50 años.

ENTRE LA FE Y LA FANTASÍA
En Argentina, el futbolista Diego Armando Maradona tiene su propia Iglesia, aunque debe reconocerse el carácter paródico y juguetón de ésta, que entre sus principios tiene el de respetar a todas las demás creencias religiosas, algo que no puede decirse de otros credos propensos a la intolerancia, la exclusión y hasta el exterminio de quienes creen en otras deidades. Religiones hay miles, algunas milenarias y muchas otras de reciente cuño, pero apenas una veintena de ellas son las que más adeptos tienen, como el cristianismo (entre católicos, protestantes, anglicanos, ortodoxos y evangelistas), con aproximadamente dos mil 153 millones, y el Islam, con mil 322 millones, según el World Christian Database (www.worldchristiandatabase.org). Los hinduistas suman 870 millones, las distintas variantes del neopaganismo cuentan un millón, y el rastafarianismo y la cienciología con medio millón cada una, más o menos, sin dejar a un lado los 55 mil seguidores de Rael, francés fundador de una secta que cree en dioses extraterrestres, así como los pocos cientos que creyeron en Jim Jones y su Templo del Pueblo, que se suicidaron en Guyana en 1978, o los también 39 suicidas de la secta Heaven’s Gate que se fueron tras la cauda del cometa Hale-Bopp en 1997. Unos 722 millones de personas, gracias a Dios, no tienen religión.
Hace unas semanas el monero Falcón publicó un cartón en el diario MILENIO Jalisco donde ironizaba sobre un comentario del cardenal Juan Sandoval Íñiguez, quien se refería a los crédulos pobladores que formaron largas colas para ver a una supuesta hada que había sido encontrada en un barrio popular de Guadalajara; el jerarca aparecía rodeado de santos, vírgenes y ángeles. Poco faltó para que el hada inaugurara una nueva confesión, de no ser porque el engaño se descubrió demasiado pronto. ¿Habría sido esto posible?
Como los dragones, ogros, brujas, vampiros, hombres lobo y duendes, las hadas comparten antiguos orígenes míticos, que más tarde serían retomados y recreados por autores como Charles Perrault, Hans Christian Andersen y los hermanos Grimm, entre muchos más. Mircea Eliade, historiador de las religiones, escribió: “Todo ser humano desea experimentar ciertas vivencias de situaciones peligrosas, enfrentarse a tribulaciones excepcionales, penetrar en el otro mundo; todo ello puede experimentarse leyendo u oyendo cuentos de hadas”.
Los miles de tapatíos que en la segunda semana de agosto fueron a ver el hada que se encontró José de la Luz, Pepe, de la colonia San José Río Verde, en un guayabo —jeje—, y que pagaron entre cinco y 20 pesos por echarle un vistazo —y comprar fotos o videos—, no fueron los primeros en caer en un engaño tan burdo. La noticia, ampliamente divulgada por los medios locales y nacionales, informaba de que Pepe vio entre las ramas del árbol un pequeño objeto brillante que volaba, atrapándolo en el acto. Vio que se trataba de un hada de apenas tres centímetros y que en la captura le rompió un pie, causándole la muerte, por lo que en su casa decidió meterla en un recipiente con formol para después colocarla en una pecera con luces de colores. La madre de Pepe fue la primera en creer que se trataba de un hada real y pronto se corrió la voz entre el vecindario y más allá de sus linderos.
El hada, pronto se descubrió, era un pequeño juguete de plástico que caracteriza al personaje de Pixie, o Megan Gwynn, del cómic de los X-Men. La investigadora Celina Vázquez, del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad de Guadalajara, dijo al diario El Informador que una posible explicación a la reacción de la gente puede encontrarse en el hartazgo ante una situación de inseguridad y violencia generalizada, además de que “las creencias en situaciones milagrosas surgen con más énfasis en grupos sociales donde se acentúan las carencias y la falta de expectativas en su horizonte de vida”. Cabría añadir que sus propias creencias quizá ya no satisfacen sus necesidades espirituales y cualquier hecho insólito es capaz de despertar en ellos fantasías y esperanzas. Por eso mismo es que proliferan las tiendas que venden figuras de hadas, duendes y ángeles con supuestas propiedades mágicas o milagrosas y a los que sus dueños confían anhelos y sueños —de la misma manera en que jóvenes skaters y darkies cargan sus muñecos, “trolls”, con los que hablan y a los que miman como si estuvieran vivos.

En 1917 dos niñas inglesas urdieron un engaño que se volvió célebre, sobre todo porque fueron capaces de hacerlo con imaginación y creatividad. Elsie Wright, de 16 años, y Frances Griffiths, de 10, tomaron varias sesiones de fotografías en el riachuelo y el bosque de Cottingley, cerca de Bradford, unas horas al norte de Londres. Elsie, una chica talentosa, estudiaba arte y trabajaba en un laboratorio fotográfico, tomó las fotos con su prima Frances, las cuales, al ser reveladas, mostraban imágenes de hadas revoloteando alrededor de ellas. El mismísimo Arthur Conan Doyle, el célebre autor de la saga de Sherlock Holmes, se interesó en el caso, pues era aficionado al espiritismo. En 1920 Doyle publicó en la revista Strand un reportaje sobre el caso, cambiando el lugar y los nombres de los protagonistas, pero un reportero de otra revista descubrió la verdad y desde entonces la historia de las chicas dio la vuelta al mundo y hordas de curiosos fueron al pueblo a tratar de cazar un ejemplar de estos fascinantes y pequeños personajes.
En una entrevista de 1982 Elsie declaró: “Nunca pensé que fuera un fraude, sólo éramos dos chicas divirtiéndonos un poco, y al día de hoy no puedo entender cómo les pudimos engañar, querían que les engañáramos”. La historia parece terminar con la subasta que se llevó a cabo en 2006 en la London’s Knightsbridge, donde una persona que guardó el anonimato compró los negativos de vidrio originales de esas fotos por seis mil libras. En cuanto a Conan Doyle, que escribió a propósito un libro llamado The Coming of Fairies (La llegada de las hadas), publicado en 1922, puede decirse que era tan crédulo e ingenuo como los visitantes del hada de Guadalajara; miembro de la Sociedad Teosófica —la de Madame Blavatsky—, Doyle creía a tal grado en los espíritus que su amigo Harry Houdini, el famoso escapista, llegó a mofarse de él.
A estas alturas ya nada debería sorprendernos, sobre todo cuando leemos noticias como la de que los mexicanos confían “demasiado en la fe y muy poco en la ciencia”, de acuerdo con la reciente Encuesta sobre la percepción pública de la ciencia y la tecnología en México realizada por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología y el INEGI. “La mitad de los mexicanos”, dice, “considera que los científicos son peligrosos para el país. Por ello, ante la presencia de enfermedades que la ciencia no reconoce, más de una tercera parte de la población dice que hay otros medios adecuados, como las limpias, la homeopatía y la acupuntura”. Y los dioses, las vírgenes, los santos, los extraterrestres, las hadas...

Rogelio Villarreal

lunes, 5 de septiembre de 2011

Hostigan a conocida empresaria de Tenosique con fetiches de brujería


Personas extrañas o brujos dedicados a la maldad a través del vudú por tercera ocasión han tratado de intimidar con hacerle daños y desearle la muerte a la comerciante del súper abarrotes “Casa Sarahi”.

La comerciante Marlene Maldonado Juárez este día al abrir la puerta de la entrada de su domicilio se encontró por tercera vez con un hallazgo, en el interior de una caja de cartón observó que se hallaba un ataúd negro fabricado con cartoncillo y con la copia de la fotografía de su credencial de elector.

A su vez también dos coronas de papel pequeñas, con flores que adornaban la cabecera de dicho ataúd, a su alrededor cuatro cirios hechos de cartón y dos cruz en los pies de dicho sarcófago y cenizas negras tiradas adentro.

La acosada explicó que ésta es la tercera vez que se encuentra con “porquerías” de magia negra en la puerta de la entrada de su domicilio, ubicado en la calle 25 a unos pasos del parque infantil del Usumacinta, la primera vez fue una bolsa de naylon con tierra negra, la segunda ocasión fue un muñeco negro con alfileres clavados en todo el cuerpo.

Y en esta ocasión el ataúd, con estas prácticas de brujerías han estado queriéndola intimidar desde hace tiempo, por lo que interpondrá su demanda ya que el velador que se encontraba de guardia logró anotar el número de las placas y el tipo del vehículo que llegó a tirar esta vez dicho maleficio.

Por lo que ya se encuentran identificadas las personas que le están tratando de hacer mal y tendrán que acudir a rendir su declaración y tendrán que confesar quién o quiénes le están pagando para hacerle perjuicio, ya que ella es una madre que trabaja para darle una buena educación a su hija y ayuda a quien menos tiene.