viernes, 29 de abril de 2011

"Preferimos comprar milagros a morir de cáncer"


“Estoy desesperada. Hace unos meses me diagnosticaron cáncer en uno de mis pulmones y pese a que estoy recibiendo quimioterapia, muchos amigos me han dicho que empiece a tomar medicina alternativa que pueda fortalecer mi cuerpo para combatir a la enfermedad de manera natural y así poder tener fuerzas para seguir con mi tratamiento”, manifestó María Osnaya, vecina de la colonia Las Palomas en Tlalnepantla.

Sin embargo, con el pretexto de contar con milenarias recetas que le han salvado la vida a miles de personas e incluso han sido investigadas por cientos de científicos, diversos comerciantes, “curanderos” y “chamanes” del estado de México, han comenzado a vender milagrosos productos 100 por ciento naturales capaces de curar el cáncer.

En un recorrido de EL UNIVERSAL Edomex por diversos mercados ambulantes y centros homeopáticos ubicados en municipios como Coacalco, Ecatepec, Nezahualcóyotl y Tlalnepantla, entre otros, se constató que diversos vendedores ofrecen estos tratamientos naturales que, con su constante consumo, combaten, e incluso, evitan cualquier tipo de cáncer, los cuales pueden ser usados por cualquier persona.

De acuerdo a algunos de estos “curanderos”, una de las recetas infalibles para combatir este mal es ingerir diariamente un cápsula de víbora de cascabel, a la cual, que se le corta tanto la cabeza como el mismo cascabel; se le quita la piel y las vísceras; y finalmente, se pone a secar al sol para que su cuerpo pueda ser molido cuando está seco, ya que según el tipo de cáncer, se debe tomar desde una a tres cápsulas al día.

Asimismo, los vendedores aseguran que “es muy importante que la persona que utilice este remedio no tome ningún tipo de medicina complementaria, pues se dice que la serpiente de cascabel es muy celosa y con cualquier analgésico o medicina extra; ‘se pierden’ sus efectos curativos”.

Otra de las recetas habituales que estas personas ofrecen a sus clientes son las llamadas bebidas o pociones “milagrosas”, que son realizadas con productos 100 por ciento naturales, que van desde licuar trozos de sábila con miel, aguardiente u otro tipo de bebida alcohólica (ron, vodka, tequila, etcétera), que haya sido previamente destilada.

Finalmente, diversos “chamanes” también ofrecen el llamado Escozul, tratamiento supuestamente creado por médicos cubanos y cuyo ingrediente principal es el veneno de escorpión azul, ya que dentro de sus múltiples cualidades, “puede ayudar a curar totalmente a personas que padecen tanto diabetes como cáncer con su uso constante”.

No obstante, para Federico Suárez, quien reside en Nezahualcóyotl, “es una verdadera burla la forma en la que estos charlatanes se la pasan a engañando a las personas que, desesperadamente, están buscando cualquier remedio que les permita poderse curar de esta enfermedad, por lo que estas personas se la pasan abusando de las desgracias ajenas sin que las autoridades hagan algo por evitarlo”.

Aunado a esto, investigaciones del Centro Oncológico del Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios (ISSEMyM), han señalado que los medicamentos genéricos y similares son inservibles para combatir el cáncer, lo que ocasiona severos golpes económicos en los bolsillos de los pacientes debido al alto costo de tratamientos como quimio y radioterapia.

De acuerdo a José Luis Barrera Franco, director del Centro Oncológico del ISSEMyM, actualmente hay medicamentos que pueden costar hasta 385 mil pesos para un solo tratamiento; razón por la que los gobiernos no declaran a esta enfermedad como una prioridad en el sector salud por su elevado costo.

Asimismo, Barrera Franco manifestó que el único aparato de radioterapia que existe en la entidad mexiquense tuvo un costo de 36 millones de pesos, pero actualmente, el costo de los nuevos equipos que ayudan a combatir este padecimiento pueden rebasar los 100 millones de pesos.

Emmanuel Suberza
29 de abril 2011
11:01

martes, 19 de abril de 2011

Crece el fervor por el Santo Niño Cautivo; que protege de la violencia


CIUDAD DE MÉXICO, 12 de abril.- Ante el aumento de la violencia y los secuestros, la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México abrió el altar del Santo Niño Cautivo, representación del Niño Dios que se encuentra en el recinto religioso desde hace más de cuatro siglos.

En los últimos años, debido al incremento de las adicciones y de la inseguridad en el país ha tomado fuerza la devoción a esa representación de Jesús. A sus pies llegan peticiones de todo tipo y de diferentes partes del país.

De acuerdo con fuentes de la Catedral de la Ciudad de México, en un principio se acudía a esta imagen para solicitar la liberación de la boca de los niños que no podían hablar; de los presos que purgaban condenas injustas y de quienes eran esclavos del alcohol.

Más tarde, se pidió también por la libertad de los adictos a las drogas, pero en los últimos años son comunes las peticiones para encontrar personas extraviadas, para que algún migrante regrese con bien a los brazos de su familia, pero sobre todo para solicitar la libertad de una persona secuestrada.

Muchos son los testimonios de agradecimiento por los favores recibidos que pueden apreciarse en la Quinta Capilla de la Catedral Metropolitana, donde el Santo Niño Cautivo tiene un lugar muy especial.

De acuerdo con Teresa Bermúdez, guías de turistas de la Catedral, algunos fieles han dado testimonio de que algún familiar secuestrado ha sido liberado, incluso sin el pago del rescate.

También recuerda el caso de un niño perdido en el Zócalo capitalino que fue recuperado luego de que su madre pidiera ayuda al Niño Cautivo y el de un indocumentado que había sido dado por muerto, pero que tras haber sido encomendado al Santo Niño, apareció con vida.

Todos vinieron juntos a darle gracias y a traerle flores, agrega Teresa Bermúdez, quien ha sido testigo de cómo en los últimos años esta devoción a la figura ha crecido por el incremento de la seguridad que se vive en el país.

jgm

2011-04-12 14:35:00

martes, 12 de abril de 2011

Santería contra el narco


Tijuana.- A muchos policías de Tijuana no les basta tener chalecos antibalas y fusiles de alto poder para combatir y protegerse del narco. Por ello han decidido echar mano de herramientas poco ortodoxas: en las playas tijuanenses realizan rituales de santería afroantillana y se ponen tatuajes que —aseguran— los protegen del poder del crimen organizado.

El oficial Elías Gutiérrez, miembro de los cuerpos de élite de la policía tijuanense, narra a MILENIO Televisión y MILENIO Diario que incluso sus tatuajes y los ritos que practica le han salvado la vida: dice que una vez se libró de ser decapitado:

“Me iba a ir con unos compañeros con los que normalmente hacía patrullajes en un autobús que solía llevarnos, pero esa noche, en vez de irme con ellos, me fui a tomar unas cervezas con otras personas. A mis compañeros los levantaron. No lo supe hasta la mañana siguiente, pero de alguna manera lo sabía: en la noche soñé con tres cuerpos decapitados. En la mañana me informaron que sí, que les habían cortado la cabeza. Entonces esta protección hace que no estés en el lugar que no debes estar, te cuida y te salva.”

Otro integrante de los grupos de élite que no quiere ser grabado narra que en un tiroteo mataron a sus compañeros, pero él esquivó las balas. “Ellos no tenían tatuajes y yo sí, eso fue lo que me libró”, jura.

Usualmente los ritos que efectúan los policías se llevan a cabo en las playas de Tijuana en las noches de luna llena. El fenómeno fue descubierto por trabajadores de limpieza del municipio que hallaban cada mes cuerpos de pollos desechos. La sangre de las aves es utilizada por los agentes para embadurnarse el cuerpo.

El oficial Gutiérrez explica cómo llegó a la decisión de tatuarse y participar en tales rituales: “Nosotros nos dimos cuenta de que los narcos andaban por aquí y por allá, y que no les pasaba nada. Era por sus ritos narcosatánicos y de culto a la Santa Muerte.

“Entonces, algunos decidimos hacer santería y otros ponerse tatuajes de protección. Me dice mi santera que los ritos y los tatuajes te estimulan como un angelito que te pica en el pie para que reacciones y te quites del lugar de peligro, por ejemplo, para que te agaches en un momento que va a pasar una bala.”

Entrevistado en un pequeño búnker desde donde observa algunas calles céntricas, el policía de élite, quien fue militar cuatro años, asegura que estos instrumentos le dan una especie de sexto sentido para combatir la delincuencia:

“Vas por la calle y sientes quién anda mal. Dices: ‘Este que va ahí’, y ¡bingo! Lo agarras. ‘Esos que andan por allá’ y… ¡bingo! Es como un sexto sentido. Por eso hemos decomisado droga, capturado sicarios y las cosas se nos han ido dando bien…

En tiempos de guerra contra el narco, hasta tatuajes y ritos santeros para salvarse…

***

Entrevistado en su pequeño local, el santero cubano Eddy Carrillo, quien realiza con los policías algunos rituales yoruba, en los que se invocan diversas divinidades protectoras, advierte:

“No son escudos, no son corazas, depende de que ellos actúen bien, honestamente, y no se metan en ambientes negativos. Lo mismo ocurre con los collares y amuletos que les damos.”

El santero explica el significado de sacrificar pollos y cubrirse con su sangre: “El ave, si es un gallo que se escogió por ser líder en su corral, por no permitir que ningún gallón lo moleste, por tener muchas y buenas gallinas, se usa como intercambio: el que hace el rito se transforma en ese gallo líder a través de la sangre que se embarra. Pero, insisto, no es un escudo ni una coraza”.

Pero los policías están convencidos de lo contrario. El Rancho, un tatuador, explica en su negocio que algunas de las imágenes que les hace son de divinidades de la guerra que les ayudan a sentirse protegidos:

“Yo no escojo ni las imágenes de los santos ni las firmas que traen (una especie de jeroglíficos): sólo se las hago en brazos, espalda, cuello, pecho o piernas. A veces me comunican con sus santeros y me explican qué colores poner: por ejemplo, como aquí (traza una cabeza en un papel), que es un niño bañado en sangre con un clavo en la cabeza. Y ellos están seguros de que eso los protege de metales y hasta balas.”

Aunque al final algunos, como el propio policía Gutiérrez, no dejan de echar mano de métodos más tradicionales:

“Además de lo otro, yo sí le pido a la Virgen de Guadalupe. ‘Mamita, ayúdame’, le digo. Y a mi pistola también le ruego: ‘No me falles, no me falles cuando disparo’”, señala el agente tijuanense.

Juan Pablo Becerra-Acosta M.

sábado, 9 de abril de 2011

Brujería, alternativa en tiempos de crisis


Monterrey, NL.- Pese a la modernidad y los avances de la tecnología, entre los habitantes de Monterrey hay un retorno al animismo, gracias al cual consultan a chamanes o curanderos con la finalidad de resolver diversos problemas desde económicos, de seguridad, salud o sentimentales.

De hecho, ante las presiones de la vida cotidiana suelen ser los personajes más solicitados para personas ávidas de hacerse de algún amuleto o participar en ritos ancestrales para atraer la buena suerte, prosperidad o al ser deseado.

Aunque la brujería en todas las comunidades pasa por una lógica terapéutica o por la solución a una enfermedad, cada vez es más frecuente que se le busque como respuesta a otras necesidades y vacíos de la sociedad.

Así lo considera el antropólogo social Roberto Rebolloso, para quien en los grandes momentos de crisis históricas y regionales, los pueblos persiguen soluciones a partir de este tipo de prácticas.

“La brujería responde no sólo a la enunciación de complejos mundos cosmogónicos, sino también a condiciones totalmente objetivas, las comunidades responden también a las presiones sociales y éstas son formas de cauce. La brujería es una expresión en momentos críticos de las culturas”, explica.

El investigador cita que, en medio de la crisis por devaluación en la década de los 80, se pusieron de moda los ritos narcosatánicos, así como una ola de santería cubana, y más recientemente, el auge del culto a la Santa Muerte.

A lo largo de su trabajo, el especialista ha encontrado que es enorme la diversidad de personajes, formas y nombres en las comunidades para designar a quienes llevan a cabo los rituales.

“Hablamos de un gran número de especialistas y rituales, una gran cantidad de oficios, un conocimiento que es múltiple y que nuestra sociedad occidental en su ánimo de traducir los reduce o simplifica en magia buena y magia mala, magia blanca o magia negra”, precisó.

Brujo, santero, curandero, chamán –palabra que tiene más un uso desde la antropología–, adivino, tecocol –el que sabe hablar–, son algunas designaciones.

El sentido de su uso tiene que ver, a veces, con lo que el creyente busque. Por ejemplo, el antropólogo Pablo Gaytán cuenta que en Temoaya, comunidad del Estado de México, se presentó un caso de una mujer que a la hora de pagar por un trabajo para alejar al novio de su hija, mencionaba que buscaba a un curandero. No obstante, el novio no lo verá como obra del curandero, sino de un brujo.

Sólo por mencionar, un “brujo” del mercado Juárez no anuncia los “amarres” como trabajos de brujería, sino como oficios ligados a la santería.

Si bien muchos de esos seres y dimensiones son herencia española, católica e indígena, en la actualidad ha habido lo que los especialistas llaman una readecuación y trasposición.

Gaytán refiere que como en las ciudades contemporáneas, en esas dimensiones y entidades existe un “panteón de divinidades” organizado jerárquicamente de forma muy semejante a la de un gobierno.

“Así como nosotros tenemos presidentes, gobernadores, síndicos y policías, en los panteones divinos hay un presidente del infierno; el señor del Agua tiene a sus topiles o policías, hay un secretario de la Tierra, etcétera”, describe.

Del argot brujeril
Brujo (a)
: Persona supuestamente dotada de poderes mágicos en determinadas culturas.
Curandero (a): Persona que, sin ser médico, ejerce prácticas curativas empíricas o rituales.

Santero (a): Persona que cree o practica la santería (sincretismo entre creencias africanas y la religión católica).

Chamán: Hechicero al que se supone dotado de poderes sobrenaturales para sanar a los enfermos, adivinar, invocar a los espíritus, etcétera.

Adivino:
Persona que predice lo futuro o descubre lo oculto, por medio de agüeros o sortilegios.

Trabajo: Preparación por medio de poderes sobrenaturales de una persona para protegerla o para perjudicarla, y de una cosa para usarla como amuleto.

Amarre: Encantamiento para asegurar que alguien quede enamorado y sujeto a la voluntad y arbitrio de otra persona.

Fuente: Diccionario de la Real Academia Española

domingo, 27 de marzo de 2011

Los Olmecas también imaginaron dragones


La adoración a los dragones no fue exclusiva de Asia y Europa. Arqueólogos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) han localizado en de Veracruz, Guerrero y Morelos imágenes talladas en piedra, pinturas en platos y esculturas de barro que informan sobre rituales de adoración a un animal fantástico: el dragón olmeca.

Estos rastros arqueológicos e iconográficos datan del periodo entre 1200 a 400 antes de Cristo. No se trata de la famosa serpiente emplumada que recibió los nombres de Quetzalcóatl y de Kukulkán. Es otra figura mucho más antigua y aún no se ha definido si debe ser considerada como una deidad, es decir como un dios.

En algunos casos el llamado dragón olmeca aparece como un animal fantástico que combina rasgos de serpiente, ave y jaguar. En otras representaciones luce como un humano que comparte detalles animales que identifican a este ser mítico.

“Tiene rasgos muy específicos de la cultura olmeca, como es un tipo de ceja en forma de llama, que conocemos como ceja flamígera; también tiene en el ojo o en el torso una cruz olmeca que llamamos la Cruz de San Andrés”, explica en entrevista la arqueóloga Carolina Meza Rodríguez, responsable de las excavaciones en el sitio de Chalcatzingo, Morelos, donde se han hecho numerosos hallazgos de esta figura. “Otro aspecto interesante del dragón olmeca es que salen de su boca unas vírgulas –signos parecidos a comas– que pueden ser palabras o nubes. También podría tratarse de algún tipo de vaho que el animal o el sacerdote lanza desde el interior de una cueva para hacer llover o para hacer fértil la tierra”, añade Meza Rodríguez.

La experta en cultura olmeca indica que hay un debate académico muy fuerte para definir si este animal debe ser llamado dragón o no. Sin embargo, por el momento la mayoría de los estudiosos usan ese término, que fue acuñado a mediados del siglo XX por dos de los pioneros en el estudio de los olmecas: Miguel Covarrubias y Beatriz de la Fuente, quienes fueron los primeros en ver pinturas de ese animal fantástico en sitios arqueológicos olmecas en Veracruz.

Símbolos del poder

Los arquéólogos Giselle Canto Aguilar y Víctor Castro Mendoza, del INAH-Morelos, también han encontrado imágenes estilizadas del dragón y de sacerdotes-dragón en el sitio de Zazacatla, Morelos. Esas imágenes están siempre relacionadas con la entrada a cuevas y al parecer habrían sido el símbolo de poder de un antiguo linaje olmeca que gobernó entre 800 y 500 antes de Cristo.

En algunas ocasiones, los elementos iconográficos que se asocian al dragón olmeca aparecen separados en diferentes partes de una cueva, en algunas partes aparece la ceja flamígera, en otras partes la cruz de San Andrés, de modo que toda la cueva se convierte en el dragón u en el animal fantástico representado por la más antigua cultura sedentaria de Mesoamérica de la que se tiene registro.

—¿En qué se parece y en qué no se parece esta figura de dragón olmeca a los dragones que conocemos de otras culturas?— se le pregunta a la arqueóloga Meza.

—El dragón más conocido es el oriental y el de Europa medieval. Estas dos imágenes se parece mucho a una imagen que están en Chalcatzingo que llamamos “la figura de la creación”, que es una figura de serpiente que tiene rostro de un ave, con fauces de águila, con alas, está volando y tiene la cruz de San Andrés en su torso. Cualquier persona que venga de otra cultura pensará que es un dragón.

También hay una figura del sitio arqueológico La Venta, que es un personaje dentro de una serpiente con rasgos míticos en los que se combinan varios animales. Son figuras mitológicas, con el sincretismo de varios animales, que en muchas culturas coinciden con la figura del dragón. En contraste, hay que decir que las deidades olmecas están más relacionadas con el agua y con la tierra y no con el fuego, como en los dragones de otros continentes— explica.

Dibujos en lugar de palabras

Debido a que la cultura olmeca data de hace más de 3 mil 200 años, es muy difícil explicar muchas cosas sobre su vida, organización, surgimiento, esplendor y ocaso. No hay documentos escritos, sus ciudades son pocas y son muy pocos los pictogramas que pueden ser interpretados. Por ello, además de los arqueólogos, los otros científicos que estudian esta cultura son los hitoriadores del arte, especializados en pictogramas.

El Instituto de Investigaciones Estéticas de la UNAM tiene un seminario especializado en murales prehispánicos y en él han participado algunos de los más importante expertos en iconografía olmeca, como Beatriz de la Fuente. Esta línea de estudio fue retomada por la doctora María Teresa Uriarte, quien explica algunas de las grandes lagunas o dudas sobre la imagen del llamado dragón olmeca.

“Es muy importante señalar que en el México prehispánico no hay representaciones de animales cien por ciento puras, o casi no las hay. ¿Qué quiere decir esto? Pues que dentro de su cosmovisión los animales se desenvuelven en el terreno de lo sobrenatural. Su mundo es numénico –sagrado– y sus representaciones recreaban un mundo sobrenatural en el cual el mito y los rituales ocupaban la totalidad de sus temas”, indica la experta en historia del arte.

Uriarte subraya que los animales sobrenaturales abarcaban un espacio que un humano no puede alcanzar, y mezclan en los seres diferentes ámbitos: tierra, fuego, aire y agua, como los cuatro elementos griegos antiguos.

—¿El llamado dragón olmeca era un dios?— se le pregunta a la investigadora de la UNAM.

—No llamaría tan fácilmente deidad al llamado dragón olmeca. ¿Por qué? Pues porque no tenemos suficiente evidencia de culto a esa deidad, como sí lo tendríamos hacia un hombre anciano que aparece en Cuicuilco y que está asociado con el fuego hasta la llegada de los españoles, y que lo llaman Huehuetéotl, que me atrevería a decir que sí es una de las deidades más antiguas— indica Uriarte.

En tanto se debaten los atributos y función ritual de las figura del dragón, los hallazgos continúan apareciendo en el sitio de Chalcatzingo, lugar considerado como un santuario localizado entre dos montañas y que se localizar a 40 minutos al oriente de Cuautla. Decenas de piezas de cerámica dejan ver la misma iconografía, pero hay grandes huecos de información sobre sus características, sus funciones y su relación con Quetzalcóatl.

“Desde algunos puntos de vista se podría decir que hay una relación con una deidad que apareció muchos años después y que es Quetzalcóatl, pero no puede demostrarse directamente esta relación porque falta información arqueológica que los entrelace directametne. Lo que es un hecho es que quienes no se refieren a este animal fantástico domo dragón olmeca lo denominan ‘el monstruo de la tierra’, conservando su función sobrenatural”, indica Meza.

Antimio Cruz | El Universal

domingo, 20 de marzo de 2011

El fidencismo, tradición y culto que no muere


Monterrey.- En vida llevaba el nombre de José Fidencio Constantino Síntora, conocido como El Niño Fidencio, y su vida lo llevó a convertirse en un icono de la religiosidad popular de México y de otros países.

Nacido en Guanajuato, pero radicado en Espinazo, poblado ubicado en Mina, Nuevo León, Fidencio es el centro de un culto organizado, emanado en la inmensidad del desierto.

Sus seguidores se cuentan por miles. Algunos acuden dos veces al año a las peregrinaciones a Espinazo.

“Pues Espinazo es el lugar más sagrado para los fidencistas, claro que ir en peregrinación a este poblado de Mina, Nuevo León, es la culminación de lo que se podría llamar un acto de fe”, sostiene William Breen Murray, antropólogo y catedrático de la UDEM.

Según el especialista, esta tradición nació de la medicina empírica, y resume mucho de los conocimientos de la herbolaria del noreste mexicano, especialmente sobre el uso de la gobernadora y la flora del desierto.

“Conocía muy bien el uso de las plantas del desierto y utilizaba la gobernadora como uno de sus remedios”, mencionó Héctor Jaime Treviño, historiador.

Por su parte, Breen Murray comenta que el fidencismo es quizás la única religión nativa del noreste de México, pero aclara que ésta no preserva ningún rasgo que lo relacione con el pasado indígena.

“Se basa en una creencia popular surgida de la admiración a la figura de un curandero de principios del siglo XX. La creencia en las posesiones y las tendencias idolátricas han llevado hasta la hacienda de Espinazo a miles de personas a visitar la tumba de Fidencio, como una especie de dogma o doctrina de fe”, explica el catedrático de la Universidad de Monterrey.

A este tipo de religiosidad, sostiene el antropólogo, se le conoce como sincretismo e integra las creencias del fidencismo al catolicismo popular, debido a la canonización del curandero, que se ha vuelto el santo patrono para varias actividades rituales en la región.

“El culto ha conducido a las peregrinaciones a Espinazo, y a un sincretismo que combina el espiritismo con el catolicismo ritual de los cristianos apostólicos”.

Mencionó la evolución que ha tenido el culto a través de los últimos años.

“Este culto se caracteriza por estados de trance entre sus chamanes y la manifestación de santidad del niño representado en imágenes; hoy en día el culto sólo se limita a proporcionar remedios básicos y a dar consultas espirituales”, puntualizó Breen Murray.

A 73 años de haber muerto, los seguidores del Niño Fidencio van en aumento, hecho que llama la atención a los especialistas.

“El fidencismo, más que una religión, es un movimiento cultural que gana adeptos, porque ven satisfechas su necesidad en esta religión, lo que se ve traducido en la propagación de este sistema de creencias”, comentó Cristóbal López, sociólogo y maestro de la UANL.

Aclara que la propagación del fidencismo responde a la satisfacción de las demandas espirituales de sus seguidores.

“Hay algunas personas que practican algún tipo de creencia y tienen algo de insatisfacción, lo que se ve traducido en el refugio de creencias alternativas, que vienen a complementar las necesidades de la gente”, externó el catedrático de la Universidad Autónoma de Nuevo León.

Lorenzo Encinas

miércoles, 2 de febrero de 2011

Niños Dios de Neza se visten de policías y marinos


Decenas de familias mexiquenses adornaron con uniformes policíacos a sus 'santitos', a fin de que los niños "nos protejan de cualquier robo o asalto"

Debido al incremento de inseguridad registrado durante los últimos meses en diversos municipios del estado de México, habitantes de Nezahualcóyotl y Ecatepec vestirán a las figuras del niño Dios que, según la tradición mexicana, son vestidas para ser bautizadas durante este día de la Candelaria, con atuendos de policías y marineros, “para que el niño nos cuide de cualquier asalto”.

De acuerdo a “Don Juan”, quien desde hace 15 años restaura y confecciona los atuendos para las figuras en el mercado José María Salcedo, manifestó que “un traje de policía puede llegar a costar hasta 350 pesos, dependiendo tanto del tamaño del niño como de la elaboración del traje, ya que podemos llevarnos hasta una semana de trabajo”.

"El significado del niño radica en la fe que pone en él cada familia y su vestimenta indica cuán arraigados están a él, por eso muchas personas vistieron a su ‘santito’ como policía o marinero para que los proteja de cualquier mal”, puntualizó José.

Dentro de los atuendos más vendidos en este año, destacan el del niño de los milagros, de la abundancia; de la salud, de los milagros; y aquellos relacionados con San Judas Tadeo, el Sagrado Corazón de Jesús, el Santo Niño de Atocha y el de pastor, “sin embargo “algunas personas también los visten con el uniforme de la sus equipos favoritos”.

Asimismo, los accesorios como sillas, zapatos, capas, tronos, cetros y el moisés pueden tener un rango de costos de entre 100 y 300 pesos, dependiendo su tamaño y el material con el que están fabricados

Un poco de historia

De acuerdo a la tradición católica, durante el día de la Candelaria, las iglesias del estado de México son visitadas por fieles y padrinos, quienes el día 6 de febrero “sacaron” al niño de la rosca de reyes, los cuales, serán los responsables de vestir al Niño Dios durante tres años consecutivos.

Según el ritual, el primer año lo tienen que vestir con ropaje blanco y sin corona ni trono; mientras que en el segundo, tienen la libertad de escoger el diseño que lucirá. Finalmente, en el tercer año es obligatorio vestir al niño como Rey y acompañarlo de trono y corona, ya que éstos adquieren con el tiempo el carácter de dador de gracias y milagros.

Asimismo, quienes hayan encontrado en su rosca de reyes el muñequito o Niño Dios, tienen la "penitencia" de invitar los tamales y el atole a familiares y amigos.

Emmanuel Suberza
02 de febrero 2011
09:31

martes, 1 de febrero de 2011

La Iglesia condena que vistan al Niño Dios “a la moda”


México.- La Iglesia católica condenó que al Niño Dios se le trate como un juguete, al vestirlo para la fiesta de La Candelaria como diferentes personajes, incluidos futbolistas, y consideró que esto sucede por ignorancia de los fieles.

La arquidiócesis de México indicó que desaprueba los atuendos de los Niños Dios que son vestidos como carros o con playeras, con shorts e incluso hay quienes lo han disfrazado de la Santa Muerte.

El sacerdote José de Jesús Aguilar, especialista en religiosidad popular, afirmó que tampoco se les puede vestir como santo, aunque se diga que estos están de moda o porque se tiene que cumplir una manda.

“Por muy ejemplares que sean para nosotros los santos, no debemos confundirnos y no debemos disfrazar a Cristo de santo.”

Para el festejo del 2 de La Candelaria al niño se le puede poner un traje de alguna advocación, como son Niño de las Palomitas, recordando el significado del sacrificio, de Nazareno, del Sagrado Corazón, de Cristo Rey, de Cristo Sacerdote, De Buen Pastor.

El sacerdote exhortó a los fieles a no dejarse llevar por “ocurrencias o modas que llevan algunas personas a vestir la imagen de charro, futbolista y hasta de Papa, porque corremos el riesgo de confundir una imagen sagrada con un juguete”. En los mercados populares, informó la arquidiócesis, se encuentra una variedad de vestimentas: sin embargo, la mayoría de los vendedores desconocen el verdadero significado de este festejo religioso, por lo que sólo buscan comercializar la fiesta y de esta forma pierde su sentido. En algunos lugares la demanda se da por la vestimenta del papa Juan Pablo II, quien el próximo 1 de mayo será beatificado.

Resignificar el arte popular

Días antes del 2 de febrero suelen verse por distintas regiones del país letreros en los que se ofrecen servicios para “vestir a su Niño Dios”, una tradición ya muy arraigada entre los grupos católicos en el festejo del Día de la Candelaria.

En el Museo Nacional de Culturas Populares (MNCP) se buscó vestir 15 figuras de Niño Dios, pero se solicitaron los servicios de diseñadores de modas para darle un carácter contemporáneo a los ropones, dentro de un diálogo entre la tradición y la vanguardia que dio como resultado la muestra Vestir al Niño Dios. Moda celestial, albergada por el recinto a partir de hoy.

“La idea es resignificar o ver nuevas interpretaciones de esta tradición, mediante la visión de quince creadores”, a decir de Rodolfo Rodríguez Castañeda, director del MNCP. Lydia Lavín, Paulina y Malinalli Pineda Covalín, Arturo Ramos, Macario Jiménez, Daniel Andrade, Marvin y Quetzal o Trista son algunos de los nombres o marcas que respondieron a la convocatoria.

“Tenemos testimonios de los creativos sobre el impacto del Niño Dios: creyentes o no, es un símbolo muy fuerte. Para la gente de sus talleres tuvo un valor muy alto, por eso cada quien, desde su perspectiva, aportó algo, ya sea más tradicional o más vanguardista, a fin de darle contemporaneidad.”

“Una propuesta fresca, innovadora”

Desde la perspectiva de Israel Labastida, especialista en modas y coordinador de la exposición Vestir al Niño Dios. Moda celestial, hay un paralelismo muy significativo sobre las tradiciones y la moda, porque ambas tienen como común denominador el dar una lectura de lo que el pueblo está viviendo.

“México no es sólo un país que vive del pasado, es un país con una propuesta fresca, innovadora, que respeta y rescata sus tradiciones. La muestra tiene ese propósito en un punto en que estamos tan globalizados, es lo que nos da identidad como pueblo, nos arraiga y nos hace sentir orgullosos de nuestra mexicanidad.”

Los diseñadores elegidos tuvieron la oportunidad de expresarse con total libertad, si bien al final descubrieron el peso de la figura, pues si bien cada uno vive la tradición de diferente manera, todos la tienen en su memoria.

“Sin embargo, éstos 15 tienen la sensibilidad para encontrar el roce justo entre moda y arte, por eso fueron elegidos”, destacó el coordinador de la muestra: “Algunos de los diseños son como los que estamos acostumbrados a ver, pero otros tocan el tema de la vanguardia, con lo que es muy interesante observar la visión de diferentes creativos que exponen una mirada muy particular de lo que es México.”

A las 15 figuras que integran la exposición Vestir al Niño Dios. Moda celestial se suman nueve fotografías de figuras más tradicionales, piezas que respondieron a un concurso que convocaba el museo en años anteriores, pero que desapareció en 2004, porque “cada vez había menos participantes”, aseguró Rodolfo Rodríguez.

Ma. Eugenia Jiménez Cáliz y Jesús Alejo

domingo, 23 de enero de 2011

Santa Muerte, entre la fascinación y el morbo


Todo tiene un principio y un final”, eso es lo que impulsa la fe que María Luisa López profesa a la Santa Muerte. Ella tuvo su primera aproximación hacia el culto a la edad de 20 años, fue ocho meses después de que su hermano Jorge despertó del coma en el que se encontraba a causa de un accidente automovilístico.

Jorge asegura haber regresado de la muerte. Refiere que durante su letargo se le presentó una singular figura: “La Santísima”. Al recuperarse, él mismo se encargó de elaborar la imagen que ahora resguarda su casa. María Luisa es quien la cuida, pues actualmente él reside en la ciudad de Chicago, Estados Unidos. Desde allá, cada mes manda dinero al Distrito Federal para que el altar de su “patrona” tenga lo necesario: veladoras, flores, inciensos aromáticos y hasta dulces.

Aunque los hermanos López no conocieron a la Santa Muerte desde pequeños, afirman que su fe es sólida, “son pocas las personas que la conocen desde niños, es difícil que te inculquen el culto”.

El escritor Homero Aridjis reafirma lo anterior. “En México la creencia es una fascinación muy fuerte, se trata de un dogma que responde a las necesidades de los seres humanos de esta época, en un momento de violencia, de enorme inseguridad, de drogadicción, de crimen, pero sobre todo de gran incertidumbre”.

José Gil Olmos, periodista y especialista en el tema, coincide: “es muy sintomático de lo que está pasando en el país, hablamos de una crisis financiera, política, económica, social y hasta religiosa. Mucha gente ya no cree en las instituciones, ya no cree en los jerarcas”

Por su parte, Aridjis considera que el interés colectivo en el culto se “reavivó” cuando surgen noticias como la captura de David Romo, obispo del Santuario Nacional del Ángel de la Santa Muerte, por su presunta participación en una banda de secuestradores. No obstante, la curiosidad en dicho fenómeno social dista de ser exclusiva de la prensa. La opinión pública se ve atraída, en primera instancia, por el morbo.

El escándalo no limita su fe

Tras la vinculación de David Romo con la banda criminal de “Los Aztlán”, las opiniones se dividen. Hay quien piensa que la Iglesia Católica aprovecha el escándalo para desprestigiar la doctrina. No obstante, para los seguidores de “La niña blanca” se trata de un asunto que no crispa su fe.

María y Jorge tienen firmes sus convicciones, señalan que el caso de Romo para nada compromete su fervor “se trata sólo de una situación desafortunada. Es ingenuo pensar que a consecuencia de esto, ¡de buenas a primeras! cambiaremos de culto. No creemos que los católicos, los verdaderos creyentes dejen su fe de lado por los actos de pederastia que cometen algunos sacerdotes; con nosotros es lo mismo”.

En este sentido, los investigadores de dicho fenómeno social manifiestan que con éste hecho, muy difícilmente existirá una reacción de los devotos de la Santa Muerte, porque David Romo ya no los representaba, ya no veían en él al jerarca, toda vez, la creación de su propia corriente religiosa.

La devoción presenta dos caras, la de la gente que pide favores: trabajo, salud; y el de las personas que solicitan protección al cometer crímenes, venganzas o asesinatos.

“La Flaca” sale a pasear

Si bien no existen referencias exactas sobre cuándo inició la popularización del culto entre los mexicanos, Homero Aridjis, autor del libro La Santa Muerte, afirma que fue a finales de los años 60. Hoy en día se estima que hay entre 5 y 8 millones de creyentes en toda la República Mexicana.

El estudio de la Santa Muerte ha crecido a nivel internacional. La Universidad de Oxford publicará una investigación antropológica para la University Press de Inglaterra, por citar un ejemplo. En Estados Unidos, diversas instituciones educativas también se han avocado a investigar el tema.

Pero eso ocurre afuera. En tanto David Romo, desde la cárcel, se mantiene firme, tiene la convicción de continuar robusteciendo, ahí adentro, el “culto a la Santa Muerte”.

sábado, 8 de enero de 2011

Publica Iglesia compendio de prácticas demoniacas


México.- La Arquidiócesis de México publicó el manual “Líbranos del mal” dirigido a sacerdotes exorcistas; en éste se ofrece una catequesis sobre la figura de Satanás y una recopilación de las prácticas demoniacas más comunes en el Distrito Federal.

El sacerdote Félix Pérez Rodríguez, autor del texto, explica que es necesario orientar a los curas en estos tiempos en que se incrementa el número de personas que se involucran en prácticas de ocultismo y esto los convierte en víctimas de terribles sufrimientos porque experimentan fenómenos sin ninguna explicación.

Dichas anomalías pueden ser ver siluetas, sombras u objetos que se mueven solos; padecer enfermedades inexplicables; escuchar ruidos; sentir que los persiguen, o llegar a ver personas que han muerto.

Y advierte que muchas personas han fallecido al ser provocadas por las “artes maléficas”, otras han sido internadas en hospitales psiquiátricos o terminan por destruir sus familias y matrimonios.

En el manual se explica qué tipo de trastornos puede causar el demonio en las personas y cómo se pueden defender.

En el tema “las acciones extraordinarias” señala que el demonio puede causar sufrimiento físico y en la posesión demoniaca los hace actuar y hablar a la persona como el demonio quiere, sin que ésta pueda resistirse. Además, explica otros fenómenos cono la vejación y la obsesión diabólica que no llegan a la posesión, pero que hieren cruelmente a la persona.

Para defenderse de estos males el sacerdote enlista las acciones básicas a seguir por los católicos: vivir en gracia con Dios, orar continuamente, acudir al sacramento de la reconciliación, llevar una vida cristiana, así como recurrir a Jesucristo, a la virgen María y los Santos.

En el manual se establece que el exorcismo mayor sólo lo puede realizar el obispo o un sacerdote especializado, mientras que el exorcismo menor u oración de liberación y de sanación lo pueden realizar otros curas.

Félix Pérez Rodríguez, sacerdote exorcista, destacó que en estos tiempos en que el culto a la Santa Muerte y a la Santería, que confunden a tantos católicos y dañan su espíritu, es importante que los sacerdotes dediquen tiempo para orar con sus fieles.

Pero la labor de ser el responsable de la pastoral del exorcismo en la Arquidiócesis lo ha llevado a crear un equipo de oración integrado por 13 personas.

Explicó que su tarea es auxiliar al sacerdote en la oración para liberar a las personas que sufren ataques demoniacos. Estas personas, destacó, fueron seleccionadas después de cursos y pláticas y son las idóneas porque reunieron las siguientes características: piadosas, sabias, prudentes y de una vida íntegra.

En los últimos años la Conferencia del Episcopado Mexicano y la Arquidiócesis de México han organizado diversos encuentros sobre exorcismo, a fin de preparar sacerdotes y laicos para combatir “las fuerzas del mal”, que se han hecho presentes en la violencia que se registra en México.